jueves, 3 de febrero de 2011

Una noticia que marca un cambio

La Semana Santa de 2011 marcará un punto de inflexión en la tradición sevilla y por ende en todas las demás que en mayor o menor medida vuelven en alguna ocasión la vista hacia la ciudad del Guadalquivir buscando alguna que otra fuente de inspiración.

Si hasta ahora el papel de la mujer en la Piedad Popular hispalense estaba reducida a pasear ataviada con negra mantilla española, del brazo de un caballero trajeado que previamente habría podido cumplir con su deseo de participación en cual desfile así sintiera; desde el próximo 2 de marzo bajo el antifaz de cualquier nazareno que recorra las estrechas calles Rioja, Tetuán o Cuna en busca de la incorporación a su cortejo, podría esconderse el rostro de alguna sevillana que así lo haya precisado.

El responsable de esto es el actual arzobispo de la archidiócesis de Sevilla que en la mañana de ayer, 2 de febrero, anunciaba la entrada en vigor de un decreto diocesano que será efectivo a partir del próximo mes y por el que se le reconoce al sector femenino algún derecho más dentro de las Hermandades y Cofradías de la capital y provincia andaluza.

Hasta el momento eran sólo 3, Quinta Angustia, Santo Entierro y Silencio; las hermandades que impedían la participación de ellas en los cortejos procesionales y que se ven obligadas por tanto a aceptar esta nueva disposición que prevalecerá sobre cualquier otra norma o regla que pudiera incluir alguna de ella en sus estatutos.

Las hermandades sevillanas ven coherente tal medida que muestra cómo la Semana Santa va adaptándose a los tiempos y dejando de lado hechos que dificultan la plena igualdad de derechos entre los miembros de las cofradías evitando así discriminación alguna en razón al sexo, afirmaba ayer el presidente del Consejo don Adolfo Arenas.

Pero, ¿marcará esto un precedente en el devenir de la Semana Santa sevillana?, ¿es cuestión de años la posibilidad de la mujer bajo las trabajaderas hispalenses en una procesión de penitencia? lo cierto es que ya hay alguna gloria que es portada a costal por cuadrilla femenina y la posible proliferación de esto entre los días de la pasión es un sueño para algunas que cada vez cuenta con la oposición de menos sectores, aunque ni mucho menos será esto una realidad a corto plazo y al sexo femenino le queda aún un largo camino que pelear en la sociedad sevillana.