CON SONIDOS DE FLAUTA Y TAMBORIL PARTIERON LOS ROMEROS HACIA LA ALDEA ALMONTEÑA

Este año la hermandad del Roció decidió adelantar la salida hacia la aldea almonteña en una jornada, tras la misa de romeros que se celebro en la Iglesia de San Pedro Apóstol sede de la Hermandad, bajo la presidencia del consiliario de la misma Esteban Belmonte, quien en su homilía a los asistentes insto a los mismo a vivir el camino, que les llevara hasta el santuario de la blanca paloma, a sentir durante unos días, la alegría que se unirá a plegarias y rezos, tanto en el Ángelus como en la salve rociera al despedir cada jornada del itinerario de un camino igual cada año pero a su vez distinto, desde la misa de alba a primeras horas de la mañana hasta el rezo del rosario ya entrada la madrugada.

En la Plaza de San Pedro la carreta engalanada esperaba la salida del simpecado, llevado por el delegado de cultos de la hermandad, para una vez colocado, rezarle y pedirle a la Virgen por el camino a realizar.

Los cánticos del coro, sonaban en el exterior del templo, dando paso a los sonidos de flauta y tamboril, delante de los cuales, podíamos ver en el cortejo otros hermanos portando las banderas, entre ellas la de Andalucía y la de nuestra Ciudad.
La carreta de alpaca plateada realizada en los talleres de Villarreal, había sido arreglada por las camaristas de la Virgen con profusión de flores en esta ocasión eran lirios con una tonalidad rosa y en el centro de la carreta se coloco el simpecado obra que realizo el orfebre Sevillano Marmolejo.

Los bueyes que tiran de la carreta son los habituales que manda Francisco López Ramón, recordemos que fue pregonero de esta su hermandad el pasado año, se inicio el cortejo, este año con un novedoso recorrido, ascendiendo por la calle torres a la Iglesia de Santiago, en la cual a su puerta le esperaban los hermanos de la Soledad, que realizaron una ofrenda a la Virgen de la Soledad en su capilla en la Iglesia de Santiago y cuyo acto culmino con la entonación de diversos cánticos entre ellos la sevillana – tiempo de tente – que entonaron a los pies de dicha imagen, siguió la comitiva para llegar a la Puerta de purchena, con un sol radiante y temperatura veraniega el cortejo, tomaba el Paseo de Almería y observábamos un colorido especial envuelto entre el colorido de los trajes de faralaes y los trajes cortos que llevaban los romeros, en cuyo pecho observáramos la medalla de la hermandad, sevillanas rocieras que se entonaban por aquellos hermanos que cerraban el cortejo.

A mediodía la hermandad llego a las puertas del Santuario de la Patrona, en la puerta del mismo, le esperaba corporativamente el Superior de los Dominicos Justo Cuberos y el Hermano Mayor de la Virgen del Mar, Elías García y Junta de gobierno, tras la ofrendan floral a la Virgen, palabras de salutación por parte de los responsables de cada hermandad, concluyendo el acto con los vivas a la Virgen, al pastorcillo divino y a la Blanca Paloma.

Durante todo el discurrir de la Hermandad se encontraban el Alcalde Luís Rogelio Rodríguez Comendador y una nutrida representación de concejales entre ellos la última que había tomado posesión en los últimos días como es Maria del Mar Vázquez y el presidente de la agrupación de hermandades y cofradías José Antonio Sánchez.

Se reinicio el cortejo, para llegar al parque de las Almadrabillas, es el lugar de encuentro, de convivencia, donde se encontraban las distintas carriolas, que seguirán al simpecado que partía de dicho lugar después de las cinco de la tarde para llegar a Fiñana en cuyo lugar se celebro una oración, para proseguir y pernotar en el cruce de Jaén en esta primera jornada rociera, siendo en la mañana de hoy cuando se incorporen el resto de la comitiva para realizar el camino que este año les lleva a Coria por donde se adentrara en las marismas almonteñas.-

Hoy tras las misa de alba y el rezo del Ángelus, la hermandad pasara por Alcalá de Guadaira hasta llegar a Coria y una vez pasado el rió realizar la acampada, segunda noche del camino.

Por Juan AGUILERA.

Foto: "Virgen del Rocío" en google